La carta de despido es un documento esencial en cualquier proceso de despido. Su importancia radica en que, si la empresa no entrega el documento o lo hace de manera incorrecta, es decir, si la carta no cumple con ciertos requisitos formales, esto puede provocar que el despido sea considerado como improcedente.
Es importante tener en cuenta que todos los despidos deben ser comunicados por escrito y que no es válido despedir a alguien verbalmente. Si la empresa quiere despedir a un trabajador, siempre tendrá que hacerlo por escrito a través de una carta de despido. Sin embargo, es común que las empresas traten de evitar esta responsabilidad y hagan uso de órdenes verbales ambiguas, como «de momento no vengas, que no hay trabajo» o «ya te llamaremos más adelante».
En estos casos, es importante solicitar la carta por escrito. Si se logra obtener una persona que sea testigo de la conversación, esto puede ser muy útil posteriormente en el caso de tener que llegar a los juzgados.
En cualquier caso, si la empresa no entrega una carta de despido formal, el trabajador debe actuar como si nada hubiera sucedido. Con esto, el trabajador debe presentarse al día siguiente para evitar que la empresa alegue que el trabajador se ausentó o dejó el trabajo por su propia voluntad.
¿Qué debe contener la carta de despido?
Esta carta es el medio que tiene el trabajador para conocer la decisión de la empresa de terminar la relación laboral y poder defenderse adecuadamente. Por lo tanto, debe contener ciertos datos para que tenga validez legal.
En primer lugar, debe contener los datos personales del trabajador y de la empresa, así como el objetivo de la carta (poner fin a la relación laboral). Además, debe incluir los motivos del despido, que pueden ser objetivos o disciplinarios.
En el caso del despido disciplinario, es importante recordar que las empresas a menudo eligen esta opción aunque el trabajador no haya dado motivos para ello, ya que buscan ahorrarse la indemnización. Es fundamental que la empresa refleje los motivos del despido en la carta, ya que no podrá alegar posteriormente ninguna otra razón en un juicio.
También se deben incluir las fechas de entrega de la carta y la fecha a partir de la cual será efectivo el despido. Es importante que la carta de despido sea clara y específica para que el trabajador pueda comprender las razones del despido y defenderse adecuadamente en caso de que decida impugnarlo.
¿Hay que firmar este documento?
Firmar la carta de despido no significa que lo aceptemos; de hecho, el despido es una decisión unilateral de la empresa y la carta es el modo que tiene de comunicarnos dicha decisión. Por tatno, con nuestra firma, lo único que reflejamos es que la hemos recibido. Eso sí:
— junto con la firma, escribe también la fecha del día, por si acaso (en muchas ocasiones la empresa pone una fecha anterior, para que se nos pase el plazo de impugnación del despido)
— quédate con una copia de la carta
En resumen, la carta de despido es un documento fundamental en los procesos de terminación de contratos laborales, ya que garantiza que se cumplan ciertos requisitos formales y permite que el trabajador pueda defenderse adecuadamente en caso de que decida impugnar el despido. Es importante que la empresa entregue una carta de despido clara y específica, que contenga los datos necesarios y que se entregue en el plazo y forma adecuados.
